El control interno adecuado es uno de los requisitos indispensables para ofrecer informes de tasación veraces. Nuestra escala de control comienza en cada una de las Delegaciones, ya que inmediatamente la tasación ha sido confeccionada en borrador, el técnico la entrega o la hace llegar vía Intranet a los supervisores técnicos de la Delegación. Estos supervisores, profesionales con al menos tres años de experiencia, hacen una primera revisión en pantalla del expediente.

Los puntos que ofrezcan dudas son contrastados con el técnico autor del informe. Se revisan especialmente aquellos aspectos relativos a tipología, régimen urbanístico, método aplicado, fiabilidad de los testigos, anexos incorporados al informe y condicionantes o advertencias efectuados.

Nuestra herramienta informática hace posible que ningún tasador pueda imprimir sus propias tasaciones en tanto en cuanto no hayan sido validadas técnica y administrativamente por la Delegación correspondiente. Una vez validadas las tasaciones, se encriptan los datos y ya no se permite ninguna modificación sobre el expediente analizado.

Esta doble escala de control permite que los informes de tasación sean fiables en cuanto a la inalterabilidad de los mismos.

Las ventajas o valores añadidos que el Departamento de control de GEVASA aporta sobre el trabajo de sus tasadores individuales es la justificación de su existencia y, son tres principalmente:
 
a.Control de las valoraciones.
b.Control, selección y formación constante de los tasadores.
c.Concentración, Organización y explotación de la información que el trabajo de la tasación genera.